3 DE FEBRERO DE 2013: LECCIÓN DE HONESTIDAD

                

Un estudiante logroñés devuelve 5.000 euros que encontró en la calle

Fernando Bozalongo y Rosa Gil entregaron el fajo a la Policía Nacional, que luego se lo devolvió al dueño

03.02.13 - 10:47 -

 

Entre tanta historia de corrupción, tanto sobre de dinero negro y tanta cuenta multimillonaria en Suiza, dos estudiantes universitarios, Fernando Bozalongo Yagüe y Rosa Gil Pelarda, acaban de ofrecer a nuestros gobernantes un ejemplo máximo de honestidad. Fernando, logroñés de 21 años y alumno de Telecomunicaciones en la Universidad Pública de Navarra (UPNA), se dirigía el pasado jueves a su facultad en compañía de Rosa Gil Pelarda, estudiante de Enfermería, de 24 años y natural de Fustiñana. Caminaban por la calle Iturrama de Pamplona cuando, según informa ‘Diario de Navarra’, Rosa creyó ver unos billetes en el suelo. Al principio, pensaron que eran falsos, pero luego, casi temblando, comprobaron que eran auténticos. Cogieron el fajo y lo contaron: había 5.000 euros.

Inquietos, siguieron su camino. «Llevaba el dinero en el bolsillo y era como si me quemara», indica Rosa. Resolvieron devolverlo cuanto antes. «¿Cómo íbamos a quedarnos con él? ¡No era nuestro; jamás hubiéramos estado tranquilos!». Cuando Fernando y Rosa se encontraron con un control de la Policía Nacional, se lo comentaron a los agentes, que no podían salir de su asombro. Les llevaron a comisaría, donde contaron la historia y dejaron el dinero. Ellos salieron, se despidieron y bajaron a la Universidad.

Minutos después, en la misma comisaría entraba un vecino de Pamplona. Quería denunciar la desaparición de 5.000 euros. Se le habían caído después de sacarlos de una oficina de Caja Laboral y no se había dado cuenta hasta algún tiempo después, cuando había intentado ingresar el dinero en La Caixa. Desesperado, decidió acudir a la Policía. Su sorpresa fue morrocotuda cuando los agentes le aseguraron que tenían el fajo en la caja fuerte.

Horas después, y a petición del dueño del dinero, los tres protagonistas de la historia se encontraron en un bar. «Me hizo más ilusión saber que hay gente como Rosa y Fernando que recuperar el dinero», declaraba en ‘Diario de Navarra’ el propietario de los billetes, que gratificó con 50 euros a cada uno de los estudiantes.